A Nivea, el mundo le parecĂa un invierno eterno. Desde que era un bebĂ©, sus padres y sirvientas le daban la espalda. Cuando se caĂa en la nieve, nadie la miraba. Era un invierno realmente terrible.
Mientras vivĂa el dĂa a dĂa como una muñeca en una estanterĂa, Nivea estaba comprometida como parte de un acuerdo prenatal entre su padre y el padre de su prometido. El duque Valor Wistash.
Como en el preludio de toda tragedia, todo comenzĂł con un amor maldito.